miércoles, 30 de diciembre de 2009


Hoy unos de mis propósitos para el año nuevo

va a ser fingir que el dolor puede causar placer

que cada puñalada en vez de derramar sangre

derramará poesía y un poco de literatura.

Para el año que viene llevo cosiendo una sonrisa para mis labios

una máscara para ocultar mis lágrimas y un disfraz para taponar

mis heridas.


Me propongo aprender el lenguaje del silencio de tus miradas, de las noches

esperando una llamada tuya o básicamente una mirada a hurtadillas.

Contaré... Uno due tre quattro… para poder respirar y no ser tan tonta y soltarte un beso

Porque como dice una canción:"Dejarse llevar suena demasiado bien…"

Y nunca he querido que las cosas vayan como la seda, porque luego el camino en vez de ser dulce es amargo; pero lo dulce sin lo amargo no es tan dulce.


Iré afilando mis colmillos para el 2010, porque voy a dejar de ser un cordero para convertirme en la fiera que desgarre cuerpos y almas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

mmm vas a dejar de pensar para empezar a actuar?? me parece mejor que mejor!

tequiero Maria.